Existe un error que comenten algunos emprendedores de pequeños negocios, que es pensar que su marca se restringe a un logotipo, al slogan y un folleto brillante. Estos son elementos de la identidad corporativa, pero una marca fuerte y exitosa integra varios componentes más, como interacciones con los clientes, las comunicaciones hacia los empleados, la filosofía corporativa y los esfuerzos de publicidad y marketing. Su marca se extiende a sus empleados, clientes, medios de comunicación e incluso el público en general como la historia anterior ilustra.
Si estos componentes no son constantemente reforzados en su marca, los clientes se sentirán insatisfechos, con el peligro que expresen sus opiniones a otros clientes potenciales o incluso en medios de comunicación, como las redes sociales, lo cual podría tener un efecto negativo para su negocio. Esto puede erosionar el valor de marca y crear percepciones erróneas acerca de su empresa o negocio en el mercado. Por otro lado contrario, la coherencia de marca en todos los niveles de la organización ayudará a impulsar una organización con posibilidades de crecimiento. Estos son algunos consejos para desarrollar una marca fuerte:
1. Reforzar la marca en los empleados
Los empelados son el punto de contacto más visible con los clientes. Son el nexo entre la empresa y los consumidores, por tanto en ellos se reflejan los valores de la marca. Las buenas empresas y negocios buscan empleados que se adecuen a la filosofía y valores que desean transmitir.
2. Desarrollar una filosofía de empresa
Una filosofía empresarial es un primer paso para reforzar la marca entre sus empleados. En ella se refleja la razón de ser de la empresa y el como se debe proceder dentro de la organización, ya sea en el trato con el público interno y externo. Esta contenida en manuales y resumidas en directrices claves.
3. Practicar lo que se predica
La mejor manera de liderar es con el ejemplo, de igual manera sucede con la filosofía de la empresa, donde todos los integrantes deben cumplir las normas. Si su marca se proyecta como organización que apoya a sus empleados y luego incumple su promesa, se distorsionará la idea de la marca en los empleados, quienes proyectarán esta distorsión con el público de consumidores.
3. Implementar directrices de la marca
Con el fin de asegurar la coherencia de marca, su organización debe establecer un marco o un conjunto de directrices internas que todos puedan seguir. No debe reducirse al uso del logo o directrices de identidad corporativa, sino a pautas reales, como mensajes clave, valores, atributos de la marca, procesos para el manejo de problemas de los clientes o comentarios. Es decir, una serie de normas para actuar en los procesos donde está involucrada la construcción de la marca. El establecimiento de directrices de la marca no deja lugar a interpretaciones erróneas y ayuda a mantener la coherencia en todos los niveles de la organización.
4. Comprender y abordar las diferencias culturales
El escenario de hoy nos coloca dentro de una economía global. Por ello se debe tener en cuenta las diferencias culturales en la construcción de una marca, sobre todo si se hay planes de expansión. Las palabras y las frases usadas dentro de la marca pueden no tener el mismo significado en otros países, ya sea por diferencia cultural o por idiomas. Por lo tanto, las marcas que desean éxito, deben trascender las diferencias culturales y las barreras geográficas.