Para los educadores uno de los esfuerzos es prevenir el abuso escolar, como líderes de negocios se enfrentan a un problema similar en el lugar de trabajo. Según encuestas realizadas a partir de 2010, el 35 por ciento de la fuerza laboral reportaron haber sido intimidados en su trabajo, por lo que el acoso es cuatro veces más frecuente que otras formas de intimidación en el trabajo.
Los líderes débiles que no toman una postura sobre el acoso también puede permitir que prospere. «Como líder, usted tiene la habilidad de crear una cultura», dice Mattice. Aquí hay cuatro maneras de prevenir el acoso escolar antes de que comience:
1. Haga hincapié en los comportamientos que usted desea ver. Para prevenir el acoso escolar, se describe los comportamientos positivos que se pueden esperar para ver en el lugar de trabajo. «Las Políticas contra la intimidación no funcionan», dice Mattice. «Hay que centrarse en lo que quiere de sus empleados. No, en lo que no quiere.»
Por supuesto, usted tiene que seguir adelante también. «Si alguien se está saliendo de la línea, pasar algún tiempo a entrenar y ayudarlos a adoptar un comportamiento adecuado.
2. Fomentar las habilidades de resolución de conflictos. Si usted nota que un empleado se esfuerza por resolver los conflictos de manera eficaz, ofrézcale algún tipo de apoyo adicional. Si el conflicto surge, hable con ellos después. ¿Qué enfoque se toman para resolverlo? ¿Por qué? ¿Cómo resolver esto? ¿Se consideran los otros métodos? Dígales lo que hicieron bien, entonces sugierales cómo podrían mejorar su enfoque en el futuro.
3. Aclare las funciones y responsabilidades. El cambio constante puede desestabilizar a los empleados, un reto particular para los arranques que suelen tener en proceso de cambio. «El cambio hace que la gente se incomode».
Para reducir el estrés, haga que los empleados estén plenamente informados acerca de los cambios y la forma en que cada uno los afectará.
4. Este disponible para la retroalimentación. En una empresa, donde las fábricas de rumores desenfrenados estaban causando disturbios, Mattice ayudó al presidente a crear una dirección de correo electrónico que los empleados podrían usar para verificar los rumores que escucharon. Él respondió a cada pregunta, un acto de transparencia que calmó a los empleados y redujo el riesgo de la intimidación.