La verdad es que todos quisiéramos disponer de mayor tiempo. El fin, pues realizar actividades que escapan a nuestros actuales horarios. Tiempo para estudiar más, hacer mayores negocios o incluso tiempo para descansar. Pero puede que las ganas e ímpetu sean insuficientes para optimizar el tiempo.
Sobre esto existen varias técnicas das por diversos especialistas. A modo de resumen explicamos cinco principios básicos para empezar a gestionar de mejor manera el tiempo:
1. Reconocer que usted no podemos hacerlo todo
Existe un mito acerca del uso del tiempo. La verdad es que no podemos hacerlo todo, pues finalmente el día tiene 24 horas y no 25. Si queremos optimizar nuestro tiempo debemos partir estableciendo una prioridad de tareas, cuales requieren mayor atención y cómo podríamos aprovecharlas de manera eficiente.
Estas tareas deben implicar un plano total, tanto como actividades de trabajo y tareas del hogar. Un uso óptimo del tiempo requiere que nos mantengamos saludables y plenos.
2. Dar prioridad
Debemos romper otro mito: no todas la actividades son igual de importantes. Debemos priorizar que actividades requieren mayor tiempo y establecerle un tiempo adecuado.
Si hacemos esta tarea diariamente, pues debemos hacer una agenda adecuada, con un cronograma de horarios. Por ejemplo, si existe una reunión importante con un cliente, esa puede que sea la prioridad del día, por lo cual debemos asignarle un tiempo adecuado.
3. Aprender a usar el «Sí» y «No»
Los ”tal vez” son muy ambiguos y no ayudan en nada si queremos optimizar el tiempo. Esto porque no permiten tomar decisiones y nos dejan divagando. Ello consume tiempo, planificación. En cambio una respuesta negativa o afirmativa nos permite tener despejado el camino para empezar a planificar.
De igual manera, cuando se nos solicita la realización de alguna tarea que sabemos trastocará nuestros horarios, es mejor y prudente decir que no podremos hacerla, porque nuestra poca disposición de tiempo será un obstáculo su óptimo desempeño.
4. Desconectarse
No podemos estar concentrados en una tarea todo el tiempo. Tal vez es el ideal para muchos empleadores, pero ellos deben entender que somos humanos y no autómatas. Una sobrecarga de trabajo o pasar todo el tiempo en una tarea llega a minar la concentración, haciendo que no desarrollemos tal actividad con toda la atención necesaria, siendo un tiempo valioso desperdiciado.
5. Tomar tiempo libre:
El éxito de un negocio requiere mucha e nuestra atención y tiempo, pero no por ello debemos descuidar otras actividades importantes, incluido el descanso. Los negocios deben ser una forma de realización personal. De lo contrario, la estaremos volviendo una carga pesada. Eso no llevará a ningún resultado bueno para nuestras vidas.
Administremos bien el tiempo. Es más, al confeccionar los horarios deberíamos empezar por las horas asignadas a nuestro descanso y goce del tiempo libre. Estos deben ser espacios sagrados. De tal manera estaremos equilibrando nuestras actividades, lo cual debe repercutir en una adecuada conducción de los negocios.