Si bien hemos mencionado la importancia de cultivar las relaciones con los clientes, pues son la base para futuras ventas por retorno; la realidad nos dice que no todos los clientes son deseables para un negocio o empresa. Ya sea por que son muy problemáticos o porque son personas intratables a pesar de nuestros esfuerzos de servicio de calidad, lo ideal es cortar relación con este tipo de personas. Después de todo, también pueden generar una mala imagen nuestro negocio o perjudicar en nuestras actividades productivas. Hay muchas razones para romper relaciones con clientes, hemos recopilado siete situaciones. Presta atención:
1. El cliente realiza abusos físicos: si el cliente hace berrinches, tira las cosas, pasa alrededor gritando y actúa de una manera físicamente amenazante, debemos retirarlo del negocio, pues incomoda a otros clientes y puede que ponga en peligro su seguridad. No importa si dice que lo siente, debe ser retirado.
2. El cliente hace comentarios despectivos: no siempre el abuso es físico. Puede que el abuso de un cliente indeseable sea de forma verbal. Si hace comentarios despectivos sobre el sexo, raza o apariencia sobre cualquier persona dentro del negocio, como empleados u otros clientes, también debe ser retirado.
3. El cliente hace demandas poco razonables: Todos los negocios destinan a personas muy razonables para la atención al cliente, sin embargo hay demandas de clientes que sobrepasan la razón y están fuera de proporción.
4. El cliente se demora en pagar: Los clientes que no pagan a tiempo son algo más que molestos, pues interfieren con el flujo de caja de su negocio. Por lo general empiezan a hacer las observaciones al producto en la sección de pago. En tal caso, como primera medida debemos invitarlos a acudir al área de reclamos o sino realizar el pago. En caso siga demorando el flujo, invitarlo a retirarse.
5. El cliente no deja de cambiar de opinión sobre el precio: en caso de servicios, hay clientes que constantemente se quejan del precio del servicio, a pesar que ya aceptó en un primer momento el precio ofrecido. Cuando se ofrece un servicio, el precio se conviene al inicio. Es mejor cortar la relación con estos clientes.
6. El cliente no sigue su consejo: hay casos de clientes que contratan un servicio y no siguen los pasos recomendados, sino que ellos actúan como los expertos. Y cuando se produce la falla, culpan al negocio. En estos casos, se debe actuar con profesionalismo y ayudar a resolver la difícil situación del cliente, pero luego y tratar de cortar la relación, pues este tipo de cliente implicaría una perdida de tiempo, que también es un bien valioso.
7. El cliente lo compara constantemente con la competencia: si bien hemos dicho que es bueno investigar a los competidores, no se debe confundir con los clientes que utilizan las cotizaciones de los competidores para conseguir una tarifa más baja en el trabajo acordado.