Al configurar su espacio de trabajo en casa, siempre debe considerar la ciencia de la ergonomía, la cual trata de adaptar el entorno de trabajo a la comodidad y salud de la persona. Esta le ayudará a promover la higiene postural durante el cumplimiento de las tareas diarias, lo que reduce el riesgo de lesiones y estrés. Los siguientes pasos te pueden ayudar a lograr tal objetivo:
1. Configure el equipo de trabajo, especialmente el monitor, el cual debe tener independencia para sus movimientos. El monitor debe estar en o por debajo del nivel del ojo para ayudar a prevenir la fatiga ocular.
2. Use un soporte o tabla ajustable para el monitor. La configuración de su monitor en la parte superior de la unidad de disco duro funciona bien para conseguir elevarlo.
3. Fije un soporte de documentos al lado de la pantalla del ordenador, para minimizar el dolor de cuello y fatiga visual.
4. Compre un kit manos libres si usa el teléfono con frecuencia. Esto le permite escribir o utilizar el ordenador mientras habla por teléfono sin poner tensión en su cuello.
5. Consiga una silla ajustable para que pueda girar y moverse con facilidad.
6. Ajuste la iluminación, por lo que hay un deslumbramiento mínimo en su área de trabajo. Apague las luces del techo y el uso de lámparas de trabajo en su área de trabajo. Cierre las persianas o cortinas para minimizar el exceso de luces molestosas.
7. Conecte una pantalla de brillo a su ordenador para reducir la fatiga ocular.
8. Limpie su área de trabajo de todos los suministros u objetos, para que pueda moverse libremente sin tocar o tropezar con las cosas.
9. Elimine de su escritorio todos los documentos, libros o materiales que no se utilizan a diario. Estos pueden ser almacenados en cajones, archivos, u otros lugares que no interfieran con su área de trabajo.