Una audiencia necesita de unos 15 segundos (máximo) para decidir si su presentación es digna de su atención. Desperdicie esos quince segundos y su público comenzará a echar un vistazo a sus teléfonos para enviar mensajes de texto.
Así es como proceder al empezar una presentación para que el público y que éste realmente se siente y tome nota.
1. Tener a alguien más que le presente.
No pierda el tiempo explicando quién es y por qué está allí. Escriba una breve nota bio (100 palabras) y una breve declaración (50 palabras) de lo que va a estar hablando. Si usted fue invitado a hablar, tiene que invitar a que lea esta información al público.
2. No le diga a un “calentamiento” broma.
No tengo ni idea de cómo el “romper el hielo con una broma” se convirtió en parte de la sabiduría convencional de negocios. La mayoría de las veces, la “broma” consiste en un débil intento de humor situacional (como “¿por qué siempre estas reuniones son el lunes?”) Que sólo se comunica que usted está nervioso e inseguro de sí mismo. El resto del tiempo, la “broma” es una historia larga con un chiste obvio que procura la paciencia de todos.
3. Abrir con un hecho sorprendente y relevante.
Para tener una audiencia atenta a lo que va a decir, primero debe atravesar el “ruido mental” que hace que su atención flaquee. Esto se logra mejor mediante una diapositiva que muestra una realidad que es nueva para el público y lo suficientemente importante como para captar su atención. Construya el resto de su presentación para responder a las preguntas de negocio que este hecho inicial ha planteado en sus mentes.
He aquí dos muestras de presentaciones para ayudar a explicar los siguientes puntos:
Malo
Bueno
“Sí, un millón de dólares”. (Pausa.) “Esa es la cantidad de dinero que está perdiendo cada año a causa de la insuficiencia widget. Afortunadamente, hay una manera mejor y voy a explicar lo fácil que es ahorrar ese dinero en lugar de desperdiciarla”.
Huelga decir que las diapositivas en el ejemplo anterior son simplistas. El “mejor” ejemplo probablemente podría ser más de gran riqueza visual, tal vez con una ilustración de dinero que va por el desagüe (junto con el US $ 1 millón).
Lo que es importante aquí es que se de cuenta de por qué la primera diapositiva sorprendente y relevante es mucho más probable para captar la atención del público que la introducción típica.
Tenga en cuenta que el “sorprendente y relevante” hecho no tiene que ser un intento de generar miedo. El hecho podría fácilmente ser sobre las oportunidades posibles, el logro de un objetivo desde hace mucho tiempo, o alguna otra cosa que inspira. Mientras que es sorprendente y relevante, el público quiere escuchar.
Fuente: https://www.inc.com