¿Qué sucede cuando un compañero de trabajo o equipo habla de una manera agresiva o pasivamente agresiva y tiende desviar sus reuniones y sus proyectos o simplemente tiene un comportamiento discordante con la cultura corporativa?. Usted y sus líderes tienen que abordar estas cuestiones. ¿Y cómo hacer esto marca la pauta para el entorno de la empresa?.
Usted no tendrá el privilegio de ser el mejor y más simpático amigo pero usted puede tener su respeto y estar rodeado de un grupo productivo y eficaz que se mueve hacia adelante a su compañía y eso es bueno para los negocios.
En vez de recompensar el comportamiento malo con su silencio, aquí hay tres jugadas decisivas para ayudar a proteger y restaurar los estándares y el enfoque equipos.
1) Crear un estándar de comportamiento de la empresa.
Enseñe a ese nivel durante la orientación y llévelo a sus reuniones de personal regulares y a los entrenamientos.
2) Cuando un miembro del equipo viola esa norma, a continuación, recuerdele cuál es el correcto comportamiento y siga adelante.
Si alguien interrumpe constantemente las reuniones, recuérdele que esa reunión también lo implica y que se espera sea alguien que aporte con sus criterios y opiniones.
Manténgase firme y entrene a su equipo de manera que reduzca la tasa de distracción. Pero también dirijase a cada ataque agresivo y pasivo directamente pero con calma.
Ser directo no significa que usted tenga que ser «agresivo». Esto quiere decir, sin embargo, que hay que ponerse de pie y llevar a su equipo. Si no lo hace, un líder oficial no lo hará.
3) Si sigue ocurriendo, entonces la amonestación debe ser formal y documentada.
Dirigiéndose directamente le permite hacer frente a un adulto. Esto demuestra que «a pesar de que tenemos un problema, está buscando una relación estable.
Fuente: https://smallbiztrends.com