Una entrevista de trabajo es un evento que produce ansiedad y puede generar cierto tipo de comportamientos que volverán inelegible a un candidato. Por ello es importante que tanto postulantes como entrevistadores conozcan una serie de comportamientos que encienden la luz roja. Recuerda que la comunicación eficaz es fundamental para el éxito en la mayoría de los puestos de trabajo. De hecho, es una de las habilidades más frecuentemente mencionados por los empleadores en sus anuncios de empleo.
Los candidatos hablan muy poco y nunca aprender lo suficiente sobre la persona para que tome una decisión de contratación favorable. Otros candidatos hablar demasiado. Hay casos donde los candidatos responden a la primera pregunta de la entrevista primero con un discurso de veinte minutos. Estos es contraproducente, pues la mayoría de puestos solicitan como habilidades claves el escuchar a los clientes.
Hay casos también donde los entrevistadores presentes se sienten incómodos con el comportamiento no verbal del entrevistado. Estaban luchando para identificar el comportamiento que había convertido a todos fuera, hasta que uno de los empleados dijo: “Yo sólo voy a decir las cosas como es. Me sentí como si estuviera hablando con mis pechos todo el tiempo – no a mí. “Las otras mujeres estuvieron de acuerdo. Ya sea nervioso o traspasado, el candidato, había hecho, miró, nivel del pecho, al contestar todas las preguntas.
¿Quieres más? Sin entrar en un análisis psicológico, otro candidato, ante un equipo de la entrevista de tres mujeres y dos hombres, no mirar a las mujeres. No importa quien hizo la pregunta, y respondió que enfrentó a los hombres. Por desgracia para él, el director de recursos humanos era una de las mujeres.
Al evaluar las calificaciones de un candidato, hacer notar sus habilidades de comunicación. Lo que brilla en la entrevista volverá y te muerden en el trabajo.