Si una sana competencia se desarrolla en tu ambiente laboral, las ventajas pueden ser muchas, tales como la promoción profesional, el respeto a la autoestima y un sentimiento de satisfacción personal, lo que lleva a un mejor estilo de vida. A continuación explicamos otras ventajas de practicar la competitividad en tu vida.
Desarrollo de la Carrera
Un espíritu competitivo y el deseo de lograr metas, ayudará a su éxito en los negocios. Las personas competitivas pueden realizar un mayor número de ventas que sus compañeros, trabajan más horas, estimulan ideas creativas y desarrollan productos y servicios de calidad, actitudes que sin duda impresionarán a sus jefes. Esto muestra un deseo por el bienestar y el éxito. Las organizaciones necesitan estas cualidades en los empleados para ser competitivos en un mercado.
Respeto de los demás
Poseer habilidades de liderazgo y un espíritu competitivo, revela a los compañeros de trabajo, jefes, amigos, conocidos y maestros que se tiene un gusto por la vida. El trabajo duro le ganará respeto ya sea en eventos deportivos, eventos para recaudar fondos, concursos de trabajo, etc. Inspirar a los demás es también una ventaja de un espíritu competitivo.
Autoestima y un estilo de vida emocionante
El trabajo duro para alcanzar las metas personales y profesionales pueden ofrecer a una persona un sentimiento de autoestima. Generalmente, las personas competitivas no tienen miedo a probar cosas nuevas, las cuales pueden conducir a interesantes oportunidades que otras personas menos competitivas no suelen aceptar. Del mismo modo, el camino hacia las metas, mejora los estados de ánimo y puede combatir la depresión.