No son pocos los trabajadores que se sienten inseguros acerca de su lugar en la empresa. Muchas veces esto es un síntoma del crecimiento de una organización, donde los empleados comienzan a sentirse inseguros acerca de su lugar en la empresa. Un ejemplo es cuando el empresario está preocupado por los problemas que enfrenta la organización y por ello contrata a un manager “peso pesado” desde el exterior. Esta acción hace que los empleados se sienten ansiosos en parte porque no entienden las razones de estos y otros cambios. Cuando la ansiedad es demasiado alta, puede dar lugar a problemas de moral y consecuente falla en la productividad.
Los empleados también pueden llegar a estar inseguros porque no son capaces de ver el valor de su cargo a la empresa. Esto ocurre cuando los roles y responsabilidades no están claramente definidas y cuando los despidos empiezan a ocurrir. Debido a ello, los empleados comienzan a preguntarse si serán los próximos en dejar la empresa. En un intento de protegerse a sí mismos, mantienen en secreto sus actividades. Esto causa un aislamiento y una disminución en el trabajo en equipo.
Departamentos enteros pueden llegar a sufrir de la necesidad de permanecer aislados con el fin de protegerse de ser eliminados. Esto puede conducir a una cierta cantidad de la esquizofrenia entre los empleados. Comienzan a preguntarse “¿Soy leal a mi departamento o la organización en su conjunto?”.
¿Cómo se puede disminuir esta inseguridad?. La práctica nos dice que es complicado disminuir este sentimiento, debido a que el temor a perder el trabajo no se puede apaciguar con un discurso de confianza por parte de la empresa. Sin embargo este último debe darse, aunque sea para calmar en parte.