Los consumidores esperan que el producto o servicio adquirido mejore sus vidas, generando un sentimiento de placer y satisfacción. Para lograr ello, los bienes ofertados deben generar una experiencia positiva, ya sea en el uso o en los beneficios que se conseguirán. Lograr esta experiencia es el gran reto al momento de elaborar una idea de negocio.
Para una idea de negocio eficiente, debemos conocer a nuestro público objetivo, pues sus gustos y estilos de vida determinarán la experiencia que estamos buscando proporcionarles, y que debe generar el sentimiento de placer y satisfacción.
Ten en cuenta que la mayoría de los consumidores quieren algo que les ofrezca el placer o satisfacción, con poco de dolor o sacrificio. Por eso son ideales los productos o servicios que simplifican tareas de distinta índoles, como las físicas, educativas y psico-sociales. Por ello gozan de mucha popularidad los productos que ofrecen bajar de peso sin muchas dietas o ejercicio. Sin embargo, este los productos de este tipo que no ayudan en conseguir los resultados deseados, solo frustran mas a sus consumidores y anulan el placer o satisfacción, siendo una muy mala idea de negocio, o tal1 vez una estafa.
Por ello, lo mejor es brindar productos que traigan beneficios en la vida cotidiana, pues la vida está llena de pequeños detalles pero que finalmente influyen en la obtención de placer. Por ejemplo, si nuestro público son los oficinistas mayores de 30 años, podemos ofrece un producto que simplifique sus tareas, en consecuencia tendrán mayor tiempo para su vida familiar o personal. O en caso de los jefes de hogar, podemos ofrece una gama de herramientas que faciliten el “hágalo usted mismo” dentro del hogar, lo que generar un sentimiento de satisfacción. Este último ejemplo pude ir acompañado de buenos precios, trato servicial; consiguiendo así un pack completo de experiencia al cliente.