Constantemente los negocios están llenos de cambios y ajustes. A veces, nuestro mercado objetivo es demasiado grande, por lo que nos adaptamos a centrarnos en las personas para que entienden mejor nuestro mensaje. Por ejemplo, el público principal de Starbucks es bebedores de café. Mientras Teavana de productos son para los amantes del té o los nuevos conversos.