La vida es demasiado corta como para estar haciendo algo que no es agradable, por lo menos parte del tiempo. Probablemente eligió la venta al por menor porque soñabas como un trabajo agradable e ideal. Son embargo la realidad de las tareas cotidianas y la frustración de trabajar con algunos clientes malhumorados puede pasar factura, por lo que ahora puede que tengas serias dudas sobre tu actividad elegida.
La realidad de la rutina de negocios
La realidad de su pequeña tienda al por menor es que proporciona un valioso servicio a los clientes y la comunidad, además es un lugar donde los empleados obtienen ingresos y crecen como personas. Sin duda que pueden surgir problemas pero la mayoría de ellos tiene solución. El problema es enfrentarse a las actividades rutinarias de su actividad de negocios. Pata ello debe buscar actividades divertidas dentro y fuera de su tienda. Recuerde que la mayoría de los problemas se resuelven con el tiempo y el esfuerzo, y no con la preocupación.
Revisión de los objetivos
Al menos una vez a la semana, debes dar un paso atrás para examinar lo que estás haciendo, además debes tomar un vistazo a todo el negocio. No sólo ayudará a su actitud mental, que puede ser un ejercicio productivo para cualquier administrador. Los detalles y las decisiones de cada día a veces pueden dar lugar a cambios inadvertidos a sus objetivos a largo plazo. Por ello debes revisar los objetivos de negocio de las siguientes maneras:
– Vuelva a leer el plan de negocio de la tienda, o al menos el resumen ejecutivo.
– Comienza un diario de minorista. Una vez por semana, añade notas sobre cómo la realidad se apilan en contra de objetivos.
– Realiza reuniones periódicas con un asesor empresarial de confianza para discutir las metas de su negocio y el progreso.
Disfrutando el día a día
Cada día para un minorista puede significar una nueva aventura o una carga sin alegría. Los hechos del día suelen ser los mismos, pero la actitud es diferente. El punto de equilibrio es encontrar maneras de disfrutar de su día. Revise sus días e intercambie actividades de la tienda. Por ejemplo un momento se puede hacer cargo del contacto de clientes, las interacciones con los empleados, estantería, caja. Salga de su propia rutina.