Muchas personas se convierten en consultores, ya que han utilizado consultores en un campo y no han estado satisfechos con los resultados. Ellos piensan “yo puedo hacerlo mejor que eso”. Su experiencia en la selección, contratación y empleo de consultores tiene un valor incalculable para definir como quiere hacer su negocio de asesoría. Tómese el tiempo para revisar sus propias experiencias con los servicios de consultoría. Considere qué consejos que ha recibido, así como qué consejo le hubiera gustado recibir.
Las siguientes preguntas te pueden ayudar a afinar tu servicio de consultoría en base a tu propia experiencia:
¿Cuál de tus propias decisiones han tenido éxito y cuáles no?
¿Hubo algún consejo específico o recursos que parecía funcionar mejor?
Si ha contratado a consultores en el pasado, ¿qué buscabas en ellos?
¿Tuvo algún problema para el que habría pagado bien para una solución?
¿Hay algún consejo que ha recibido de otros que se sienten ha sido muy valioso para usted?
Enumere cinco o seis elementos que según su experiencia, deben ser incluidos en un servicio de asesoramiento eficaz.
También se puede aprender mediante la observación. No siempre tienes que participar directamente en las situaciones para obtener conocimiento de ellos. Usted puede ver y aprender. Por ejemplo, usted no tiene que ser un niño para observar lo que los niños necesitan para ser felices. Usted puede estudiar con cuidado y aprender de sus observaciones para empezar a crear su propio negocio de consultoría.
Recuerda dos cosas importantes sobre la consultoría:
– En cualquier negocio, el éxito requiere de la empatía y la empatía requiere experiencia. Cuanto más sepa acerca de su cliente, serás más capaz de servirle mejor.
– La consultoría es un intercambio. Usted tiene el conocimiento y la sabiduría sobre un tema específico y el cliente tiene el dinero. Usted debe intercambiar lo que sabe, compartiendo la información o el diseño de una solución. La transacción debe tener suficiente valor para ambas partes.